Comprar compulsivamente activa en el cerebro mecanismos similares a los de ciertas sustancias, generando una satisfacción momentánea que puede tener consecuencias graves: problemas emocionales, económicos y de salud mental.
Es común en parejas de personas adictas, que buscan en las compras una vía de escape, pero esto puede desencadenar trastornos como la ciclotimia o incluso bipolaridad latente. Además, esta dinámica puede reforzar los ciclos de consumo en la relación.
Por eso, en Centro Life abordamos las adicciones de manera integral, trabajando tanto con la persona como con su entorno familiar, promoviendo una recuperación completa y saludable.